Hay que saber un cosa.
Al menos en 2013 el funcionamiento de las excursiones era el siguiente, el guía te llevaba por la ciudad, se encargaba de pasearte, contarte y solucionar los problemas dentro del radio de su jurisdicción. Pero, cuando pasas a otra ciudad, te dejan en el transporte y adiós, muy buenas.
Solo habíamos aprendido dos palabras...Ni Hao (hola!) y Xie xie (gracias!)
Nuestro próximo destino era Xian. El vuelo salía a las 20 y llegaba dos horas después, con lo que el guía nos llevó al aeropuerto , agitó la mano en señal de saludo y arréglense. Aeropuerto doméstico en China......y veinte sujetos hispanoparlantes tenían que averiguar la puerta de embarque, hacer el chek-in. ...y llegar vivos al siguiente destino, buscar el número de la cinta que transportaba nuestro equipaje ....sin entender una palabra de chino mandarín .
Xian, una ciudad amurallada, antiguamente la capital del Imperio y el inicio de la Ruta de la Seda, punto de encuentro de varias culturas y religiones del mundo, de poetas , emperadores, cortesanos, monjes , mercaderes y soldados.
Una ciudad impresionante y diversa.
Y ahí llegábamos, como náufragos nocturnos , para ser recibidos por una nueva guía. Primer viaje, estresante pero cumplido. Las valijas fueron subidas a dos trafic blancas, incluida el mamotreto mío, y nosotros en un minibus .
La secuencia siguiente, la misma de siempre, registrarse , recibir las llaves de la habitación y subir a esperar el equipaje. Todo en orden.
Sólo que pasó una hora...y después otra y aparecieron todas las valijas...menos la mía.
Decidí ir a recepción donde me dijeron que habían repartido todas.
Me puse un poco intensa y les rogué que la buscaran, no sé si me entendían el inglés, pero sí entendían mi cara de problemas. Después de varios conciliábulos en chino, llamaron al aeropuerto.
Yo les decía que había visto cómo la metían en la trafic, pero ellos....nada.
Con una mirada lúgubre me informaron que no estaba. Pero que seguro que aparecía por algún lado, quizás la entregaron en otra habitación.
Lo único que quería en el mundo esa noche era lavarme los dientes con mi cepillo y derrumbarme para dormir. Agotada.
El contingente hispanoparlante al completo dormía como un bendito y yo....
eran las 12 de la noche y seguía subiendo y bajando a recepción hasta que dije...la última vez y me voy a dormir igual, esté como esté y mañana denuncio la pérdida.
Y el ascensor no subía........aporreé varias veces el botón en un ataque de nervios ......cosa que como sabemos todos ,es inútil. Nada.
Camino por los pasillos de ese inmenso edificio hasta encontrar el ascensor de servicio.
Hasta que llega y abre sus puertas y allí....sola y desprotegida, deambulante nocturna y silenciosa...estaba ella...negra, grande y repleta.
Decir que fue un encuentro lacrimógeno sería un poco exagerado así que la agarré de la manija y entré triunfante en el cuarto. Y aquí paz y después gloria como dicen los españoles.
Nunca me enteré de lo que había pasado y nadie explicó qué hacía mi valija subiendo y bajando sola por el ascensor de servicio de un hotel en China. a la una de la madrugada.
El Ejército de Terracota
Como decía antes , Xian es una ciudad multifacética y culturalmente variada, pero lo más importante es el descubrimiento sobre los años 70 , de un ejército de guerreros de terracota, miles de soldados y caballos, armas y carros en formación de batalla.
Era el ejército de Qin Shi Huang el primer Emperador , el unificador del vasto territorio de China , recordado como un tirano.
Qin se impuso por la fuerza, en un estricto cumplimiento de la ley y aplicando castigos cruentos, contraponiéndose a los principios de moralidad y ética de Confucio.
Sin embargo fue el que introdujo una sola moneda, estandarizó la escritura ,y unió las fortificaciones del interior de China que luego darían lugar a la Gran Muralla.
Los arqueólogos suponen que Qin pensaba seguir reinando después de muerto o tal vez tuviera miedo de los espíritus derrotados de su pasado que lo pudieran acechar en el más allá.
Fuera lo que fuera , el ejército custodia su tumba. Año tras año se descubren más figuras y lo que es más impactante, no hay dos iguales .
Te invade una sensación de incredulidad al ver las caras distintas y las expresiones y cómo algo tan perfecto pero a la vez frágil se mantuvo a través de los tiempos, más concretamente desde el 221 a.c hasta su descubrimiento.
Qin reinó con mano de hierro y generó grandes enemigos entre los eruditos de su propia corte también....que fueron los que escribieron la historia.
Diversidad cultural en Xian
En la ciudad existe un barrio musulmán, con olor típico a cuscús y otra especias, comidas callejeras, pagodas , espectáculos musicales, y muestras de arte de las etnias minoritarias.
Una noche fuimos invitados a otro banquete con espectáculo musical.
Mientas se desarrollaba , nos servían unos , creo que se llaman dim sum, que son como ravioles grandes hervidos y servidos en unas canastitas de mimbre que mantienen el calor.
Te servían de a uno, para que no se te enfriara y sus formas variaban. Pregunté de qué estaban rellenos. La moza me contestó que mirara las formas...tenía uno en un plato , con forma de pescado...fish..exclama!
El siguiente...duck! exclama. El otro....Pig !! digo yo........y el que viene....tiene esta forma 🐱...........hasta acá llegué pensé, y miré al Partner que contenía la risa prolijamente, así que los dos pasamos....y sin preguntar.
Xian, fue uno de los puntos que más me impresionó de todo el viaje no sólo por su historia , sino por el desarrollo de la arqueología que año a año sigue encontrado pistas y rastros para armar el puzzle de las civilizaciones de Oriente.
Mientras, nos dirigíamos al sur y el calor aumentaba . La valija , repleta de ropa de abrigo y medio tiempo, parecía tener luces de neón, prendían y apagaban sucesivamente unas letras que decían.....error...error...error....
Si por unos momentos uno cierra los ojos desde arriba de las murallas....puede imaginar las caravanas que venían del desierto, el andar de camellos y las tiendas, las hogueras y la música bajo el cielo estrellado, el intercambio de mercaderías entre distintos pueblos y las oraciones para que la fortuna acompañara el regreso a casa.
Y más allá...la épica, el ejército que espera la orden de su guerrero máximo...y aún más allá...Qin y su sueño de unificación.
Xian es toda un resumen de la historia del imperio chino y de la confluencia de grandes masas de gente nómade, de un territorio quizás inapropiadamente extenso para gobernar y habitar que, al contrario de otras grandes naciones, nunca se fragmentó.
Xian, punto de encuentro de culturas.
Me encantó!!! Sos genial escribiendo! Es como leer una novela ❤ el misterio de la valija, increíble!!
Los guerreros de Terracota en la Ciudad de Xian, me impresionaron profundamente por sus expresiones tan bien logradas y conservadas a través del tiempo.